A continuación vamos a dar algunos consejos y trucos que nos ayudarán a evitar la tan temida obesidad infantil.
La educación de los hijos
En primer lugar debemos tener muy en cuenta que la mejor forma de evitar la obesidad infantil es educando adecuadamente a nuestros hijos, y nuestro objetivo siempre será que se acostumbren a ingerir aquellos alimentos que son buenos para su salud, dejando de lado los que puedan perjudicar.
Evidentemente esto no es tan sencillo como parece, y dependiendo de cada caso deberemos analizar el modo en el que procederemos, y en este sentido puede ayudarnos mucho nuestro médico de confianza.
Es habitual que a muchos pequeños no les gusten las verduras, el pescado, legumbres, etcétera. Por esa razón tenemos que buscar el sistema que nos permita introducir todos estos ingredientes pero sin que les cojan manía, para lo cual podemos optar por cocinarlos de forma más disimulada.
El ejercicio físico
Los ordenadores, juegos, teléfonos inteligentes, tabletas, etcétera son muy positivos para el desarrollo de los pequeños, pero también pueden convertirse en entretenimientos que les impiden practicar el ejercicio físico que tanto necesitan.
Por ello siempre intentaremos estimular aquellos juegos que requieran movimiento, y siempre que sea posible que los lleven a cabo en compañía.